Sally Hansen, una mujer que se hizo a sí misma
LA DESCONOCIDA HISTORIA DE UN ICONO
LA DESCONOCIDA HISTORIA DE UN ICONO
Durante mucho tiempo, la historia de Sally Hansen fue todo un misterio. No había nada sobre ella en internet, ningún libro, ni tampoco retratos que nos permitiesen conocerla. Nada que pudiera confirmar su existencia. No obstante, sí que existía la leyenda de una glamorosa y atrevida emprendedora, una mujer que se valió por sí misma y cuyas ideas se adelantaron a su tiempo. Entonces, ¿quién fue la auténtica Sally? ¿Cuál fue su historia? En 2014, un equipo de periodistas de investigación recibieron el encargo de averiguar su historia. Tras meses de pistas falsas y horas transcurridas analizando los archivos de los ayuntamientos y documentos olvidados apilados en garajes, finalmente Sally Hansen pudo salir a la luz.
Su espíritu atrevido e independiente llevó a Sally a dejar su trabajo en la empresa familiar para perseguir su sueño de hacerse bailarina.
Se trasladó a Hollywood, California, donde conoció el éxito como bailarina y coreógrafa, llegando a representar papeles en producciones como “Beverly Smiles", “Peggy Ann” y “Spring is Upon Us”.
A mitad de los revueltos años 20, ella y su elegante y vividor marido, Adolf Hansen, llegaron a hacerse habituales en la escena social hollywoodense, y con frecuencia celebraban fiestas en su glamuroso chalet de estilo español a las que acudían célebres estrellas del espectáculo. Un chalet diseñado por la propia Sally.
Rubia, bajita y siempre a la moda, Sally se hizo famosa por su estilo vanguardista y su forma de pensar progresista.
Sus ideas atrevidas y su manera de expresarse con franqueza, pornto encontraron una potente vía de expresión en su columna del diario The LA Times, “Your Candid Mirror”, en la que escribió más de 91 artículos.
Mucho más que una columna de sociedad o de recomendaciones de belleza, “Your Candid Mirror” fue una poderosa tribuna para la voz de la mujer fuerte e independiente, capaz de valerse por sí misma.
Una mujer cuyas opiniones se adelantaban a su época y que creía en que las mujeres tenían el poder de alcanzar su máximo potencial en belleza, negocios y en sus propias vidas.
Tras su temprana carrera como bailarina, Sally, con la ayuda de su esposo y su hermano, finalmente se quedó a cargo de la empresa familiar de cosméticos, la que reinventó como “House of Hollywood” y transformó en un negocio lucrativo. Y este suceso marcó el comienzo de Sally Hansen, la mujer emprendedora que se valió por sí misma. Sally quiso crear una línea de productos de belleza dirigida a mujeres auténticas que fuera a la vez innovadora y asequible. Una belleza que se hiciera notar.
A comienzos de la década de 1940, Sally había hecho de “House of Hollywood” una exitosa compañía y la había ampliado mediante la incorporación de una fábrica. Se rumoreaba que contribuyó al esfuerzo bélico, fabricando plasma sanguíneo gracias a sus líneas de producción de cosméticos.
Su primer matrimonio fue con Eugene Gunther, que resultó ser un bebedor violento. En 1929 Sally obtuvo el divorcio acusando a su marido de beber en exceso.
Su segundo matrimonio con Adolf Hansen resultó ser mucho más feliz. Pero en el fondo, Sally quería ser independientemente, por lo que el 1 de octubre de 1946, volvió a divorciarse. Esta vez la separación fue de manera amistosa.
Sally tuvo el valor de separarse de su marido, sus amigos y su glamuroso estilo de vida hollywoodense para perseguir su sueño de crear su propio imperio de belleza en la ciudad de Nueva York.
Había nacido Sally Hansen Inc.
Finalmente, Sally era libre para crear la empresa con la que siempre había soñado. Una compañía con su nombre y con un logo diseñado a partir de su propia firma.
Uno de los primeros productos que registró como marca comercial fue el ahora icónico “Hard As Nails”, y así, Sally Hansen continuó hasta convertirse en la marca número uno de productos para las uñas en los Estados Unidos.
Con amigas como Helena Rubinstein y Estée Lauder, Sally Hansen desafió al mundo liderado por hombres con el que se había tenido que abrir paso. Su objetivo, redefinir la industria de la belleza siguiendo sus propias pautas. Pero Sally no era fruto de la riqueza previa o los privilegios sociales. Era una mujer que se valía por sí misma y que buscó el desarrollo de su propia empresa, ella sola.
En 1957, Sally contrajo matrimonio con Jack Newton, 11 años menor que ella, el diseñador gráfico responsable del diseño de marca que llevaba el nombre de Sally. Su nueva vida en Nueva York, a partir de ese momento, fue de una amplia relación con personalidades creativas y librepensadores, entre los que había músicos, artistas, escritores y travestis.
Sally Hansen murió a los 56 años, el 16 de diciembre de 1963, después de su lucha durante 6 meses contra un cáncer pulmonar.
Su tumba es pequeña y sencilla. Una lápida en el cementerio de Hollywood Hills que, hasta hace poco, estuvo casi cubierta de tierra y apenas visible.
Un humilde lugar de descanso para una grande de la industria de la belleza que fue capaz de valerse por sí misma.
Hoy, Sally Hansen Inc. es una de las marcas de belleza más grandes del mundo. Pero el legado de Sally es mucho más que eso. La historia de Sally Hansen una mujer que se valió por sí misma y desafió a su tiempo, sigue siendo a día de hoy al igual que en su tiempo, una inspiración para todas las mujers.